Ninguno lo es...

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viernes, 2 de mayo de 2014

LA MAGIA DE ARZHVAEL El Inicio - Cap. 48 -

CAP. 48  LA ENTREVISTA…

Giulian había despertado temprano, con la sensación de no haber dormido. Cuando salía del baño se encontró con Willow, el Nisser de su casa.
-         Buenos días señor  --  lo saludó y le tendió una taza
Giulian la tomó y lo miró con  desconfianza.
-         Si es una de tus bromas…
-         Willow ya está muy viejo para bromas, señor  --  dijo el Nisser
-         Eres viejo desde que te conozco  --  dijo Vlad, que entraba en ese momento --  y eso nunca te ha impedido fastidiarnos.
-         ¿Los demás ya se levantaron?  --  preguntó Giulian
-         El señor Natchzhrer se levantó muy temprano  --  informó el Nisser  --  y el señor O’Malley creo que no durmió en lo absoluto. El joven McKenzie no ha salido de su habitación aún.
-         ¿Y Eve?  --  preguntó Vlad
-         El señor debe saberlo mejor que Willow  --  dijo el Nisser con una sonrisa torcida
-         ¿Y por qué habría de saberlo?
-         Como el señor estaba allí anoche.
-         No seas necio Willow  --  dijo Vlad con exasperación  --  el hecho de que haya pasado por la habitación anoche, no significa que haya amanecido en ella.
-         Claro, disculpe señor. Y no, no he visto a la señorita aún.
Giulian miraba a uno y a otro con desconcierto, Willow era la clase de Nisser menos apreciada, porque era de los burlones. Aunque era igualmente fiel, gustaba de hacer bromas pesadas a sus amos. Pertenecía a los Cornwall desde hacía muchísimo tiempo, pero por su condición de Nisser bromista, había sido relegado a una de las propiedades rurales. Sin embargo, cuando nacieron los gemelos y en vista de que apenas comenzaron a caminar habían demostrado ser terribles, sus padres decidieron traer a Willow para que se hiciera cargo de ellos, pero de los dos, el que peor se había llevado con  Willow, siempre había sido Vlad, razón por la cual el Nisser lo fastidiaba con más ahínco. Con la única que no se metía era con Angela, y nunca supieron la razón.
-         Estamos esperando a una persona más  --  le dijo  --  avísanos si llega y  no hemos bajado aún.
-         Bien señor  --  inclinó la cabeza y desapareció en su bola de humo
-         ¿Qué hacías en la habitación de Vampi?
-         Nada, solo quería ver si estaba todo en orden.
-         ¿Y por qué  no habría de estarlo?
-         Giulian, fue simple cortesía.
-         ¿Y desde cuando eres cortés con ella?  --  insistió el otro  --  Te has pasado media vida queriendo quitarle la cabeza
Pero antes de que Vlad pudiera contestarle, Giulian escupió el café en todas direcciones.
-         ¡Estúpido Nisser, voy a romperle hasta el último de sus miserables huesos!
-         Estúpido tú, que sigues confiando en él  --  se burló Vlad
Cuando bajaban las escaleras, escucharon que Iván saludaba a Leomer. Y unos minutos después, estaban todos en el Salón.
-         Bueno, ya nos esperábamos algo así  --  dijo Leomer después que escuchó el relato de los últimos acontecimientos  --  ¿Y ya llegó la citación?
-         Hace unos minutos  --  dijo Iván mostrando un papel
-         Eowaz, esto podría ser una trampa, lo has pensado ¿no?
-         Sí, ya pensamos en ello  --  dijo él  --  pero si nos negamos a asistir, estaríamos en problemas aún mayores. Sin embargo, y considerando esa posibilidad, hemos tomado precauciones, y en caso de que intenten detenernos, se llevaran una desagradable sorpresa, porque aún seguimos siendo Arzhaelíes, pueden superarnos en número, pero no en habilidad.
-         ¿Y los Kriger?
-         Ya fueron advertidos, en el momento en que nosotros estemos entrando al Edificio del Consejo, ellos dejaran la Sede y deben desaparecer hasta que se les llame  --  dijo Vlad
-         ¿Y  los que están en entrenamiento? ¿Cómo garantizaremos el regreso a sus lugares de origen? Yo avise a los Delegados de Seguridad como me dijiste, pero no les hablé de una fecha.
-         Pues, tal vez se sorprendan entonces al verlos regresar dentro de unos momentos  --  dijo Iván
-         Delos, Dorila y Jonathan  --  dijo Eowaz adelantándose a la pregunta de Leomer  --  permanecerán en la escuela, en caso de emergencia, Delos y Dorila cubrirán a Jonathan mientras él saca a los niños.
-         Bien  --  dijo Giulian poniéndose de pie  --  si todo está claro, vamos allá y terminemos con esto de una vez.

Los Arzhaelíes aparecieron justo frente a la plaza frente al Edificio del Consejo de Estado. A pesar de los constantes ataques de los que habían sido objeto en los últimos días, y que la prensa aseguraba que ya no contaban con el aprecio y el respeto de la población, apenas aparecieron tanto los viandantes como los que entraban o salían del edificio, se detuvieron a mirarlos y en la gran mayoría de los casos, les dirigieron el mismo respetuoso saludo de siempre. Un par de niños los señalaron con emoción, mientras sus madres les aferraban las manos para que no corriesen en dirección de los Arzhaelíes.  Cuando el compacto grupo se dirigió a la entrada, todos los que se encontraban allí abrieron paso.
-         Quizá no nos quieran  --  dijo Giulian mientras le sonreía a una chica --  pero ciertamente aún nos temen
-         No seas necio Giulian  --  dijo Vlad  --  sabes tan  bien como nosotros, que lo que ha salido publicado, son sucias mentiras
-         Y no es con temor precisamente que te están mirando  --  agregó Eve
Mientras se adentraban en el edificio, vieron con desagrado que no habían esperado a participarles su destitución, para sustituir a los que custodiaban el edificio. El negro y vino tinto, que eran los colores distintivos de la Orden, había sido sustituido por el mono cromatismo del negro que vestían los nuevos guardianes.
Cuando llegaron a las puertas de la Sala del consejo de Estado, los mismos individuos les cerraban el paso. Iván y los gemelos, se llevaron las manos a los bolsillos de forma automática, pero Eowaz los detuvo.
-         Buenos días señores  --  saludó el Arzhaelí  --  los miembros del Consejo nos esperan.
Uno de los individuos, abrió y entró para salir casi inmediatamente y permitirles pasar.
-         Buenos días  --  los saludó Peter  --  Tomen asiento por favor.
-         Gracias  --  dijo Eowaz sentándose
Leomer y Eve también lo hicieron, sin embargo, Iván, los gemelos y Peter, permanecieron de pie detrás de ellos. Eowaz paseó la mirada alrededor, pero todos, a excepción de Peter y Eric, evitaban mirarlo. Entre tanto Iván sonrió para sus adentros, por lo transparentes que resultaban aquellos individuos, pero clavó sus ojos en los de Lery, y ese breve instante de descuido por parte del Nemhain, le reveló una inquietante información que no perdió tiempo en pasar a los demás. Nurión viene en camino. Y aunque sus expresiones no variaron, Iván sabía que se preparaban para las posibles consecuencias.
-         ¿Y bien?  --  preguntó Eowaz  --  Estamos aquí en atención a su llamado.
-         Eowaz  --  comenzó Peter con evidente malestar  --  este Consejo ha decidido retirarlos del cargo de Guardianes.
-         Bien  --  dijo el Arzhaelí  --  están en su derecho de hacerlo, y asumimos que este Consejo sabe y está consciente de sus actos.
Nadie dijo nada, aunque hubo varias miradas de desagrado, por parte de algunos de sus miembros.
-         Si es eso todo  --  dijo Eowaz al ver que nadie decía nada más  --  supongo que podemos retirarnos.
-         No  --  dijo Izidor  --  eso no es todo, también se les ordena disolver la Orden.
-         ¿Por qué?  --  preguntó directamente
Pero nadie parecía capaz de responder a eso, de modo que insistió.
-         ¿Puede alguien en esta sala darnos una razón convincente, para una acción tan drástica contra la Orden?
-         No tenemos por qué hacerlo  --  dijo Lery, viendo que nadie respondía  --  el Consejo…
-         Te equivocas Kristof  --  lo interrumpió Eowaz  --  asumo que siendo un miembro reciente de este Consejo, no estás enterado de algunos hechos básicos.
El resto de los Arzhaelíes sintieron un incontenible deseo de reír al verle la cara a Lery.
-         ¿De qué hablas?
-         Hablo de aquello que obviamente tú no sabes  --  continuo Eowaz  --  La Orden Arzhaelí es una institución creada mucho antes que cualquier institución política, y no fue concebida para brindar seguridad a la población, esta tarea fue asumida por la Orden a pedido del Consejo de Estado, pero sus fines originales y principal actividad, están por encima de los cambios que se dan con el tiempo, porque son de orden filosófico y espiritual,  y ciertamente están muy por encima de los caprichos de cualquier político.
-         Ninguna institución por antigua que sea puede estar por encima del Consejo de Estado  --  intervino Benjamín Wolfe
-         Lamentable error, y más lamentable aún que los miembros de este Consejo desconozcan sus propias limitaciones  --  dijo Eowaz mirándolos  --  Como dije, están en su derecho de relevarnos de la responsabilidad por la seguridad, pero su campo de acción llega hasta allí. El resto de las actividades de la Orden están fuera de su alcance, y siendo que no dependemos en lo absoluto del Estado, creo no tenemos nada más que hablar al respecto  --  finalizó poniéndose de pie
-         Sugiero que vuelva a sentarse  --  dijo Wolfe  --  porque suponiendo que todo lo que ha dicho sea cierto, no es menos cierto que aunque intente hacernos ver que la Orden es intocable, no lo son sus miembros  --  dijo mirando a Iván y a los gemelos  --  porque siguen siendo ciudadanos de este país y deben regirse por nuestras leyes.
-         Así es  --  reconoció Eowaz  --  y ninguno tiene intenciones de quebrantarlas.
-         El problema señor O’Malley es que ya lo han hecho  --  aseguró Wolfe  --  y espero suponer correctamente, que no se negará usted a escuchar la denuncia que sustenta mis palabras.
-         Un momento  --  dijo Peter  --  esto no era lo que se había planteado.
-         Pero ya que están aquí  --  dijo Lery  --  ¿por qué no aprovechar la oportunidad?
-         Porque esto está fuera de orden  --  dijo Peter con indignación
-         Déjalo Peter  --  dijo Eowaz  --  no tenemos problema alguno en escucharlos, y siempre que sus demandas sean razonables, actuaremos en consecuencia 
Wolfe le hizo una seña a uno de los Vänator, y éste abrió las puertas dándole paso a Bastian O’Neill. Aunque Bastian llevaba años ejerciendo el juego político, su odio por aquellos individuos era muy superior a su sentido común, de modo que fue visible e innegable el brillo feroz de su mirada al dirigirla hacia el grupo de Arzhaelíes. Sin embargo, y aunque el sentimiento era plenamente correspondido, la batalla por la serenidad la tenían ganada los Arzhaelíes al ser capaces de enfrentar aquella mirada con absoluta frialdad y total ausencia de expresión.
-         Supongo que ya conocen al señor O’Neill  --  dijo Izidor
-         Bastian  --  dijo Eowaz a modo de saludo y con la mayor serenidad
El los miró pero evidentemente el saludo, si es que en algún momento tuvo intenciones de hacerlo, se le quedó atravesado en la garganta. De modo que se volvió hacia Peter.
-         Señor Presidente, vengo a hacer una solicitud formal, para que a este hombre  --  dijo señalando a Iván  --  se le detenga.
-         ¿Qué?  --  preguntó Peter, cuya indignación no podía ser mayor
-         ¿Y bajo qué cargos?  --  preguntó Eowaz, que no había perdido su serenidad 
-         ¡No hablo contigo, anciano!  --  le gritó Bastian
-         Si solicitas la detención de uno de mis hombres, hablas conmigo  --  dijo Eowaz  --  Quizá te resulte difícil de entender, pero dentro de nuestra Orden tenemos una jerarquía, y ella me hace responsable por todos ellos.
-         Pues si tantas ganas tienes de hacerte responsable por ese miserable, y de ir a la cárcel por él, peor para ti.
-         ¡Señor O’Neill!  --  exclamó Peter, y el hombre se volvió hacia él  --  Estamos dispuestos a escucharlo, pero le agradezco modere su vocabulario.
Para todos fue evidente que Bastian tuvo que hacer un gran esfuerzo por controlar su ira, y Wolfe inmediatamente acudió en su ayuda.
-         Señor O’Neill, díganos por favor la naturaleza de su solicitud, y así podremos tomar las acciones pertinentes  --  dijo en forma solícita
-         Hace poco les solicité un juicio para establecer mis derechos sobre la custodia de mis nietos, y por cierto aún no he obtenido una respuesta  --  comenzó  --  Pero ahora debo añadir a lo anterior, que no solo se me está privando de mis derechos, sino que este hombre, les está haciendo un gran daño a los niños contándole mentiras para ponerlos en mi contra.
-         Disculpe  --  dijo Eric  --  pero en qué se basa usted para asegurar eso.
-         ¡Toda la escuela los escuchó!
-         Pero no lo hiciste tú personalmente ¿no es así?  --  preguntó Eowaz, y al no obtener una respuesta prosiguió  --  Por tanto es algo que no puedes comprobar.
Bastian miró a Lery, y este acató la orden.
-         Mi hijo fue uno de los que escuchó esto  --  dijo
-         Ahí está tu prueba  --  dijo Bastian, y miró a Agnan el Delegado de Justicia  --  exijo la detención de este individuo.
-         Mucho deben haber variado las leyes, si se basan en la palabra de un niño que ni siquiera está presente, para detener a un hombre  --  dijo Eowaz
-         Creo que lo mejor será resolver este asunto de una vez  --  dijo Agnan  --  convocaré de inmediato a los miembros del Dómi, y tendrá su audiencia esta misma tarde señor O’Neill. Mandaremos a traer a los niños  --  continuó  --  y en cuanto a usted señor Natchzhrer, deberá permanecer en custodia hasta tanto se efectúe la audiencia.
-         ¡Agnan!  --  exclamó Peter poniéndose violentamente de pie  --  ¡Esto es completamente irregular y lo sabes!
-         Te sugiero no oponerte a esto, Peter  --  le dijo
Bastian y Lery miraron a Iván con expresión triunfante, pero él no les estaba prestando atención, se encontraba muy ocupado tratando de tranquilizar a Peter.
-         Peter, no lo hagas. Ya sabíamos esto. Mantente al margen.
Eowaz se había puesto de pie.
-         Dije que los escucharíamos en tanto el asunto fuese razonable, y ciertamente no lo es  --  dijo  --  por tanto no estamos de acuerdo.
-         Eso no tiene ninguna importancia  --  dijo Wolfe  --  Natchzhrer queda detenido, le guste o no, y le aseguro que no necesitamos su consentimiento, ni podrá impedirlo.
Mientras él hablaba, Agnan había hecho una seña a los Vänator.
-         Me temo que tendrán alguna dificultad con eso  --  dijo Eowaz, mientras todos cerraban filas en torno a Iván
-         Son ustedes muy necios si piensan que pueden abandonar un lugar lleno de los mejores guerreros que existen  --  dijo Bastian
-         En este caso el necio estás siendo tú Bastian  -- dijo Eowaz sonriendo  --  y como de costumbre es tu arrogancia lo que te pierde.
Con una rapidez impresionante, los Arzhaelíes extendieron sus Gwialen y golpearon el piso.
-           ¡CRYNDOD!  --  el piso fue sacudido por un violento temblor
-         ¡Deténganlos!  --  gritó Agnan
-         ¡BREKEN!  --  atacaron Eve y Peter a los que venían
-         ¡DINISTRO!  --  apuntaron los gemelos al techo y este se vino abajo
-         ¡BESHERMING!  --  lanzó Iván hacia los miembros del Consejo con el fin de protegerlos
-         ¡AHORA!  --  dijo Eowaz
-         ¡IMMA OCH DAMM!  --  dijeron todos
Lo último que vieron los asombrados miembros del Consejo, fue una nube de polvo que desapareció dentro de una densa niebla que comenzó a extenderse por toda la sala. Peter y Eric se miraron y sonrieron aliviados.
Tardaron un buen rato en poder disipar la niebla, mientras Bastian, Lery y Wolfe daban órdenes a los Vänator.
-         No lo puedo creer  --  dijo Agnan mirando con ira a los Vänator  --  los dejaron escapar.
-         Creo que olvidaste lo más importante  --  le dijo Eric y Agnan lo miró con desconcierto  --  olvidaste que estos no son hombres comunes, son Arzhaelíes, de modo que tus chicos no tenían mucha oportunidad.
-         ¡Estos tampoco son hombres comunes!   --  exclamó Bastian con rabia
-         Pues acaban de demostrar que son bastante comunes  --  dijo Peter y volviéndose hacia los demás  --  creo que por hoy no podemos hacer mucho aquí.
-         Son unos salvajes  --  dijo Lery, cuando iban saliendo
-         ¿Qué harías tú si intentaran detenerte injustamente?  --  le preguntó Peter cuando pasó a su lado, sin que nadie más escuchase y sin detenerse.

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La reunión de Profesores fue interrumpida por una figura perlada que hizo su aparición y se dirigió directamente a la directora.
-         Eirian, el secretario del Consejo Escolar solicita verte con un mensaje urgente del Delegado de Justicia  --  le dijo
-         Gracias Sir William  --  dijo ella con calma y luego miró a los Profesores  --  Lo siento pero debemos suspender esta reunión  --  y mirando a Dorila y a Delos  --  ¿Podrían acompañarme?
Salieron de prisa y se dirigieron a la dirección. Pero antes de entrar Delos se detuvo.
-         Dorila, entra tú yo esperaré tu señal y si es lo que suponemos le avisaré a McKenzie.
Así lo hicieron y en cuanto entraron Eirian dio su permiso para que el secretario hiciera su entrada a través del Dver.
-         Buenos días Eirian  --  saludó ignorando a Dorila  --  Debo cumplir una orden del Delegado de Justicia.
-         ¿Y esa orden es?
-         Debo llevar a los gemelos Douglas a Kelten de inmediato.
-         ¿Y con qué objeto?  --  preguntó ella dándole tiempo a Dorila de avisar a Delos
De modo que un par de minutos después, Delos tuvo que enviar el urgente mensaje a Jonathan.

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Sam y Aderyn, se habían puesto en marcha tras Diandra después de su discusión con Danny y con Jonathan, pero se detuvieron en cuanto escucharon la voz de Delos.
-         McKenzie, sácalos. Vinieron por ellos, hazlo ¡AHORA!
Las palabras de Delos solo tardaron un par de segundos en penetrar en el cerebro del chico y traducirse en una orden.
-         Pónganse sus Skik y comiencen a correr  --  les dijo
-         ¿Hacia dónde?  --  preguntó Danny mientras él y los demás se ponían sus Skik
-         Hacia el Bosque del lado Oeste.
-         ¿Qué?  -- preguntaron todos a una, porque ese era el lugar más peligroso de Develieng
-         ¡CORRAN!  --  les ordenó

Y recordando las órdenes de Iván, no hicieron más preguntas y corrieron.

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