Ninguno lo es...

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domingo, 9 de febrero de 2014

LA MAGIA DE ARZHVAEL El Inicio - cap. 07 -

CAP. 07  EN LA CASA DE LOS NATCHZHRER

Aunque los chicos eran pequeños, sabían algo de geografía, por lo tanto sabían la diferencia entre un país y una ciudad. Por eso cuando iban camino a la casa, sintieron curiosidad.
-         ¿Cómo se llama esta ciudad?
-         Kelten  --  dijo Iván  --  es la ciudad capital de Helgard
Hasta donde habían podido observar, Kelten  era una ciudad muy moderna, que no se diferenciaba aparentemente en nada, de cualquier otra ciudad. Había grandes edificios, centros comerciales, calles y avenidas muy concurridas. La única diferencia, era que no había tráfico. Esto lo notó Danny, ya que su padre solía quejarse mucho de los embotellamientos, y de los “estúpidos” a los que en su opinión no debían otorgarles permisos de conducir. Y la razón de que no hubiese tráfico, era la ausencia de vehículos. En lugar de ello, sobre las avenidas había un trazado de vías para la circulación de trenes.
-         Iván  --  dijo Danny  --  ¿Los Arzhvael, no tienen coches?
-         No  --  contestó Iván
-         ¿Por qué, acaso no saben conducir?
Iván rió, ante la pregunta.
-         Supongo que habrás visto el gran problema que ocasionan los vehículos, en las grandes ciudades ¿no?  --  y el chico asintió  --  bien, pues entonces ¿para qué querríamos algo así? Tenemos un excelente medio de transporte que nos lleva a donde sea necesario, sin tanta complicación.
-         ¿Y qué medio es ese?  --  ahora fue Samantha la que preguntó
-         Por los rieles que se ven en el piso  --  dijo Danny  --  debe ser una especie de tren, como el DART*  de Dublín.
-         Bastante parecido  --  dijo Iván
Pero Samantha, no tenía idea de qué hablaban, porque nunca había estado en Dublín, ella había crecido en Escocia. Sin embargo, no hubo necesidad de explicaciones, porque enseguida escuchó un sonido y en cuanto se volvió, vio un modernísimo Expreso que se había detenido casi en el lugar donde ellos se encontraban. Iván y Eve los guiaron hacia las puertas.  No obstante el asombro de los chicos fue enorme. Eve introdujo una especie de tarjeta de crédito en una ranura ubicada al lado de la puerta y esta se abrió, más al entrar, no se encontraron en el interior del vagón de un tren, sino que se encontraron en una pequeña y cómoda sala de estar. Los niños miraron asombrados a los mayores y estos les sonrieron.
-         Este es nuestro Overdrachter  --  les dijo Iván
Les indicaron que podían sentarse, pero los chicos estaban mirándolo todo, y cuando por fin habían decidido sentarse, el vehículo se detuvo, en lo que le pareció un tiempo asombrosamente corto. Al bajar se encontraron frente a unas verjas, tras las cuales y un poco retirada, se veía una casa con un pequeño, pero cuidado jardín. Iván coloco una mano sobre las rejas y estas se abrieron.
Los niños miraron a su alrededor, y a Samantha le entró curiosidad, porque parecía una zona rural, no se veían más casas o edificios.
-         Ya no estamos en Kelten  --  dijo Iván mirando a Samantha  --  Estamos en Allia, queda algo retirado de la ciudad, pero es una zona más tranquila.
Entraron y luego de mostrarles la casa, los condujeron hasta las habitaciones que ocuparían. Luego de bañarse y cambiarse, bajaron para la cena. Pero antes de pasar al comedor, Samantha no lo soportó más.
-         ¿Dónde está Vlad?  --  preguntó
Iván y su hermana se miraron antes de hablar.
-         No estoy seguro  --  dijo finalmente Iván  --  pero no te preocupes, estará bien.
-         Durante el día  --  comenzó Samantha con cuidado  --  he escuchado que han mencionado a un tal Giulian  --  se detuvo un momento a observar las reacciones y luego continuó  --  ¿Quién es y por qué Vlad se molestó tanto cuando Delos, lo mencionó?
-         Giulian  --  dijo Iván  --  era el hermano de Vlad
-         “Es”  --  dijo Eve, acentuando la palabra  --  Giulian es el hermano de Vlad.
-         Pero ese hombre dijo que estaba muerto  --  dijo Danny
-         Verán, Giulian desapareció hace cinco años  --  continuo Iván  --  lo hemos estado buscando desde entonces, pero todo ha sido inútil, lo que nos induce a pensar que Nurión…
-         No  --  lo interrumpió Eve  --  si lo hubiese hecho se habría vanagloriado de ello. Giulian está vivo  --  finalizó con seguridad
-         Contestando a tu pregunta Sam  --  dijo Iván  --  si Vlad se molestó tanto, no es solo porque Delos haya dicho eso, sino porque Giulian y Delos, nunca se llevaron bien. Cuando íbamos al colegio era frecuente que alguno de los dos, terminase en la enfermería. Así que Vlad interpreta su comentario más como un deseo, que como un hecho cierto
-         Pues ahora entiendo  --  dijo Danny  --  si yo hubiese sido Vlad, le habría acomodado un buen derechazo a ese individuo.
-         Y eso habría hecho, si Iván no me hubiese detenido  --  escucharon
Samantha corrió y abrazó a Vlad, muy aliviada de verlo en casa.
-         No te preocupes Vlad  --  dijo Danny  --  si tu hermano está vivo, lo vamos a encontrar.
-         Claro que sí  --  lo apoyó Samantha
Los mayores sonrieron al ver la determinación de los niños.
-         Sé que está vivo, y sé que vamos a encontrarlo  --  dijo Vlad  --  y se pondrá muy contento de verlos, especialmente a ti Samantha.
-         ¿A mí? ¿Por qué?  --  preguntó ella
-         Porque él es tu padrino.
La niña se llevó las manos a la boca, y de pronto sintió la urgente necesidad de encontrar a aquel hombre estuviese donde estuviese.
-         ¿Y quién es el mío?  --  preguntó Danny con curiosidad, porque si Samantha tenía uno, él sin duda debía tenerlo también
-         Yo  --  dijo Iván  --  yo soy tu padrino y Eve tu madrina.
Danny sonrió complacido, mientras Samantha miraba a Vlad.
-         Lo siento Sam --  dijo él con pena  --  tu madrina fue asesinada poco después de la desaparición de Giulian.
Samantha sintió un profundo dolor. Aquel hombre, Nurión, porque no le cabía ninguna duda de quién era el responsable de aquella muerte, les había quitado a sus padres, y a su madrina, pero si existía la más mínima posibilidad de que su padrino estuviese vivo, se juró que lo encontraría. No sabía cómo, pero lo haría.
-         Estoy seguro de que lo haremos Sam  --  le aseguro Vlad
Después de cenar, apareció sobre la mesa un gran pastel que decía Feliz Cumpleaños Danny y Samantha. A pesar de que los padres adoptivos de Danny no se habían portado todo lo bien que hubiesen esperado, al menos en sus primeros años de vida, tuvo pastel de cumpleaños. Pero en el caso de Samantha, en el orfanato no acostumbraban celebrarlos, por lo que aquel era su primer pastel de cumpleaños. De modo que por sus mejillas comenzaron a correr las lágrimas. Vlad que fue el primero en notarlo se alarmó.
-         ¿Sam?  --  dijo inseguro, nunca había sido muy bueno para consolar a nadie
Iván se levantó de su silla y se acercó a la niña, pero enseguida se hizo cargo de lo que sucedía, ya que en aquel momento la niña había descuidado sus defensas, y pudo ver sin dificultad alguna lo que pasaba por la mente infantil. De modo que se inclinó hacia ella y le acarició el cabello.
-         Tendrás muchos pasteles de cumpleaños de ahora en adelante, linda
Cuando se fueron a la cama, Samantha pensó que a pesar de todo de lo que se había enterado, que en gran parte era triste o preocupante, ese había sido el mejor día de su vida. Así que se durmió con una sonrisa en los labios.

A la mañana siguiente, Danny despertó sobresaltado. Cuando abrió los ojos casi se cae de la cama, y aunque por un momento pensó que estaba soñando, después de asegurarse que estaba despierto, se enderezó y detalló al inesperado visitante que lo había sacado tan bruscamente de su sueño. Se trataba de un hombrecito que apenas levantaba algo más de medio metro del piso, su rostro era muy semejante al de cualquier persona, pero lo miraba fijamente con unos pequeños ojos de un color amarillo brillante. Su piel era de un extraño verde pálido, la nariz era pequeña al igual que la boca, y su cara estaba bordeada por una barba muy tupida de color rojo al igual que su cabello.
-         ¿Quién es usted?  --  preguntó Danny con cuidado, aun no muy seguro de su salud mental
-         Mi nombre es Kobil  --  dijo el hombrecito, con una voz bastante más agradable de lo que Danny se habría atrevido a esperar  --  el amo Iván me envió a ver si el pequeño estaba despierto.
-         Bueno  --  dijo el chico con practicidad  --  ahora lo estoy
-         El amo lo espera para desayunar y el baño ya está preparado  --  le informó
-         Gracias  --  dijo Danny, y para su asombro el hombrecito se disolvió en una nube de humo
Se dio toda la prisa posible en bañarse, vestirse y bajar. Llegó al comedor y ya estaban todos allí incluida Samantha. Recibió el saludo alegre de todos y se sentó a desayunar.
-         Iván  --  dijo  --  ¿Qué es esa “cosa” que enviaste a despertarme?
Los tres adultos rieron
-         No me digas que Kobil te asustó  --  se burló Vlad
-         ¡Claro que no!  --  exclamó Danny  --  es solo que quiero saber qué es.
-         Kobil  es un Nisser  --  dijo Iván 
-         Gracias, pero eso no me dice mucho  --  dijo el chico de mal talante
-         Los Nisser, son una clase de duende muy colaborador  --  aclaró Iván 
-         ¿Algo así como un sirviente?  --  preguntó
-         Yo en tu lugar, no utilizaría esa palabra en presencia de ningún Nisser  --  dijo Vlad
-         No exactamente  --  continuó Iván  --  Verás, la raza de los Nisser, durante mucho tiempo fue esclavizada. Eran obligados a trabajar para los Nemhain.
-         Estos sujetos cada vez me caen peor  --  intervino Samantha
-         Sin embargo, hace algunos siglos, durante una de las muchas batallas entre Arzhvaels y Nemhains, los Nisser fueron liberados, razón por la cual, éstos en agradecimiento pueden escoger servir a alguna familia de Arzhvael. Y una vez que han escogido una, lo harán toda la vida  --  concluyó Iván
-         ¿Y qué sucede si cambian de opinión?  --  preguntó Danny  --  es decir, si una vez que escogen a alguien, luego se dan cuenta que no les agrada lo bastante.
-         Eso no sucede Danny  --  le aclaró  --  porque en cuanto toman su decisión, quedan atados a ella por un poderoso hechizo que los hace asumir no solo las costumbres de dicha familia, sino sus gustos, sus afectos y sus odios.
-         ¡Vaya!  --  exclamo asombrado  --  ¿Y Kobil lleva mucho tiempo contigo?
-         En realidad está en mi familia desde mucho antes de que nosotros naciéramos  --  le dijo  --  Creo que alrededor de unos doscientos años.
Danny escupió su jugo en todas direcciones.
-         ¿Doscientos años?   --  preguntó más allá del asombro  --  ¿No mueren?
-         Así es  --  dijo Iván sonriendo  --  los Nisser solo mueren si son atacados con un arma de hierro forjado, es a lo único que son vulnerables. De lo contrario pueden vivir indefinidamente.
-         ¡Vaya!  --  repitió el chico
Luego de esto Samantha fue la que mostró su curiosidad, pero en otra dirección.
-         ¿Cuándo comenzamos la escuela?  --  preguntó a nadie en particular
-         Las clases comienzan el 1 de febrero  --  contesto Eve  --  y finalizan el 30 de noviembre de cada año.
-         ¿Qué?  --  preguntó Danny con horror  --  ¿Tantos meses?
-         Tienen un período de un mes libre a mediados de año, en agosto  --  dijo Eve  --  se les llaman vacaciones de verano. Y regresan a la escuela el 1 de septiembre, hasta noviembre.
Aunque Danny estaba bastante horrorizado, pensó que aun estaban en diciembre y quedaba todo el mes de enero.


·        DART: Dublín Área Rapid Transit

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